Las Ratas que no Lamían a sus Crías

COMPORTAMIENTOS QUE SE PERPETÚAN

Utilizar animales en la investigación nos da pistas valiosas sobre los mecanismos genéticos que se producen en el hombre. En un principio, se pensaba que se tenía que pasar la cultura animal (comportamientos normativos para sobrevivir) de generación en generación, pero, con el paso del tiempo, se observaron comportamientos idénticos entre padres e hijos sin razón aparente; esto implicaría la existencia de algo más, un componente genético que hiciese que el aprendizaje de los padres se perpetúe en los hijos.

Un ejemplo son las ratas que no lamen a sus crías, esto ocurría en aquellas que no habían sido lamidas por sus padres; comportamientos que se repiten con madres adoptivas o vientres de alquiler en humanos. En el mundo de las ratas, los lametones son muestras de afecto y su ausencia provoca estrés en las crías. Por lo tanto, el hecho de dar lametones está muy influenciado por la genética y no por ambiente en sí. ¿Puede significar esto que los lametones cambian el material genético de las crías?

Esto no ocurre sólo con los lametones, sino también con la nutrición. Machos de la misma camada que se someten a dietas totalmente distintas engendran descendencia con patrones de metabolismo muy diferentes. Sería como si dos gemelos idénticos que se separan al nacer y se crian en dos culturas muy diferentes, se reencontraran para observar que ya no son tan idénticos.

En otras ratas se hizo el mismo experimento pero provocando miedo a un determinado olor a un grupo de hembras. Su descendencia nacía con ese mismo miedo al olor aunque no lo habían experimentado nunca.

¿CÓMO FUNCIONA LA EPIGENÉTICA EN ESTOS CASOS?

La epigenética no altera el material genético cambiando las piezas que lo forman, sino alterando las etiquetas, marcas y reguladores. Esas etiquetas permiten al material genético aumentar, disminuir o regular la producción de las piezas. De forma que:

Mismo manual (material genético) + distintas anotaciones (cambios epigenéticos)= Resultado (fenotipo) diferente

 

Hay varias teorías de por qué ocurre este proceso o qué mecanismo y vía lo regula. Es curioso porque debe ser un proceso tan potente que conecta un estímulo ambiental con el genoma humano. Pero no sólo ocurre eso, sino que sus efectos perduran en la fecundación y la maduración genética del feto. 

Se cree que las células madre troncales del embrión, se "reinician" y se colocan en su sitio para asegurar el marcaje correcto (las etiquetas/anotaciones) de forma que se  garantice la actividad adecuada (fenotipo) en el linaje.

A nivel del material hay muchas posibilidades: metilaciones, reorganización, marcaje de histonas y nuestra favorita, los micro ARN no codificantes. Estos últimos son capaces de, no sólo cambiar la expresión génica de la propia célula, sino que, a través del torrente sanguíneo, tienen el mismo efecto sobre células distantes.  

CONCLUSIONES

Según algunos autores, es posible que, mediante mecanismos aún desconocidos, las células nerviosas sensitivas reciban el estímulo del ambiente y que, mediante micro ARN, se produzcan cambios epigenéticos en las células sexuales. Así se conseguiría una modificación en la descendencia que perpetuaría el cambio de comportamiento. 

Por último sólo nos queda decir que extrapolar estos datos de las ratas a los humanos es muy tedioso y complicado, pero en nuestra siguiente entrada vemos cómo podemos solucionar el tema.